beciclos

La “start-up” Beciclos nace bajo tres premisas de sostenibilidad: impulsar el reciclaje, reutilizar materiales y llevar la cultura de la bicicleta a otros países donde aún no tiene un gran arraigo como medio de transporte. Los integrantes de Beciclos creen que en muchos casos no tiene sentido guiarnos por el usar y tirar a la hora de adquirir según qué productos, cuando es posible reciclar y reutilizar.

Tres españoles y un holandés residentes en Amsterdam, la ciudad de las bicicletas por excelencia, se dieron cuenta de que se abandonaban muchísimas en la calle. Pensaron en que lo que es un desperdicio para algunos, podría convertirse en una pieza de gran valor para otros. Así que comenzaron a recoger esas bicicletas abandonadas para buscarles una nueva casa.

Las bicis son reparadas por personas con problemas que se encuentran en programas de reinserción social, y para esas reparaciones utilizan piezas y materiales donados por sobre-producción de un gran fabricante. Tras pasar ese proceso es cuando se les busca una familia adoptiva. En su tienda online Beciclos no realiza ventas sino adopciones, y es que los integrantes del nuevo hogar deben firmar un formulario en el que se comprometen a cuidar de la bici.

Ana Larrea, una de las promotoras de Beciclos explica que “los envíos se realizan a toda Europa. Hemos comenzado fuerte en España. Queríamos empezar a crear un cambio, impulsando que la gente adquiriera una bici y dejara un poco de lado el coche”. Uno de los objetivos primordiales de esta “start-up” es llevar la cultura de la bicicleta a otros lugares donde no está tan extendida.

Además, estos 4 emprendedores saben que no hay mejor forma de vender un producto que contando una historia. Por eso, en la ficha de cada bicicleta, además de las características técnicas, al nombre con el que ha sido bautizada le acompaña una breve historia.