Como ya venimos diciendo en otros posts, arrojar o abandonar basura tiene graves consecuencias mediambientales. En este sentido, el littering, se ha convertido en algo bastante habitual en entornos naturales, lo que deja claro que hay que concienciar al ciudadano sobre este problema.

 

Una de las consecuencias de este tipo de prácticas es el aumento del riesgo de incendios, un problema que se ve agravado cuando llega el verano y suben las temperaturas. Según las últimas estadísticas del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, sólo en los cinco primeros meses del año se han quemado en España más hectáreas de bosque que en la media de la última década. Además, en lo que va de año se han contabilizado un total de 8.060 siniestros, de los que 3.409 han sido incendios de más de una hectárea y 4.651 conatos (menos de una hectárea).

 

Como ya hemos mencionado, el verano es la época del año más susceptible de sufrir las consecuencias del littering. Las temperaturas, el viento y la falta de lluvias acrecientan aún más la posibilidad de que se produzca un fuego en el campo. Una realidad que se ve agravada por determinadas actividades o actitudes humanas, ya que se estima que más del 90% de los incendios que se producen en nuestro país, ya sea de forma directa o indirecta, tienen su origen en actividades desarrolladas por el ser humano en el campo.

 

Cualquier descuido puede ser la causa de una tragedia medioambiental. Por ejemplo, el abandono de aerosoles o botellas de vidrio en el entorno natural puede ser la causa de un incendio. Por esto, resulta básico no arrojar basura en el campo.

 

Por este motivo, SEO/BirdLife y Ecoembes lanzan cinco consejos para prevenir incendios forestales:

 

  1. No se deben tirar colillas encendidas al suelo y tampoco por la ventanilla del coche.
  2. No se debe tirar ni dejar basura fuera de las papeleras. En el caso de que no haya una en las proximidades, se guardarán los residuos para depositarlos en el contenedor correspondiente más adelante.
  3. Las hogueras, incluidas las de la limpieza de los montes y quema de rastrojos solo pueden encenderse en zonas y épocas autorizadas.
  4. Cuando te ausentes del campamento o te vayas a dormir, no dejes la hoguera ni las lámparas encendidas, aunque sea una zona habilitada para encender fuego.
  5. Si el fuego está muy cerca, intenta bordearlo y huir rápidamente. No subas por la montaña, ya que el fuego avanza más rápidamente que las personas.