En 2020 se reciclaron 64.287 toneladas de envases de aluminio a través de distintos flujos como son las plantas de selección, las plantas de residuos, las recogidas complementarias y los gestores de residuos tradicionales.

Esta cifra supone un incremento del 21% con respecto al año anterior, que fue de 52.814 toneladas. En 2020 se alcanzó una tasa de reciclado del 52,1%, ya que se pusieron en el mercado 123.449 toneladas de envases de aluminio. Y, si se suman las toneladas procedentes de otras valorizaciones (2.329), se obtiene una tasa total de valorización del 54%.

La Directiva Europea 2018/852 del Parlamento Europeo y del Consejo establece que, en el año 2025, debe reciclarse el 50% de los envases de aluminio y, en 2030, el 60%. Gracias al esfuerzo de los ciudadanos que cada día depositan más envases de aluminio en el contenedor amarillo y a la optimización de las plantas de selección, ya se ha podido alcanzar el objetivo previsto para el 2025.

El cometido de ARPAL, Asociación para el Reciclado de Productos de Aluminio, se centra en promover el reciclado de envases de aluminio y alcanzar las tasas de reciclado requeridas por la legislación, realiza cada año un estudio para conocer las toneladas recuperadas en plantas de gestores de residuos. Los datos de este estudio, en el que también colabora la Federación Española de la Recuperación (FER) complementan los aportados por Ecoembes (los envases de aluminio recuperados a través del contenedor amarillo, de plantas de residuos y compostaje y de recogidas complementarias).

Todo el aluminio que se recupera se recicla, constituyendo una excelente materia prima para volver a fabricar productos de aluminio, ya que en el proceso de reciclado no cambian las propiedades de este material. De hecho, el 75% de todo el aluminio que se ha fabricado desde hace 100 años se encuentra actualmente en uso, en forma de diversos productos, gracias al reciclado.