A finales de septiembre, se celebró en Madrid el Congreso SAVE FOOD 2016, una iniciativa impulsada por la FAO, que cuenta con el apoyo del Club de Exportadores, la Asociación Española para la Codificación Comercial (AECOC) y el Grupo IFA, cuyo objetivo es luchar contra el desperdicio alimentario en el mundo.
Más de 1.300 millones de toneladas anuales de alimentos (un tercio de la producción mundial) se desaprovecha cada año, por lo que urge poner en marcha una serie de mecanismos que frenen este problema. SAVE FOOD es una campaña orientada a reducir tanto las pérdidas como el despilfarro de alimentos.
España es el sexto país de la Unión Europea que más comida desperdicia (según estimaciones de la Comisión Europea, en torno a 7,7 millones de toneladas), por ello MAGRAMA ha puesto en marcha una serie de acciones. Mediante la estrategia “Más alimento, menos desperdicio” se pretende organizar, coordinar y estructurar las actuaciones de las Administraciones Públicas y de todos los agentes que conforman la cadena alimentaria. El objetivo es dar a conocer dónde, cuánto, cómo y por qué se producen pérdidas de alimentos, y a partir de ahí diseñar las acciones de sensibilización y buenas prácticas.
Por su parte, Sogama ha puesto en marcha la web www.aproveitatedoquechesobra.es, mediante la que explica las consecuencias del elevado desperdicio de alimentos y proporciona las claves para amortiguarlo. Recomienda planificar la compra, hacer una lista detallada de lo que se necesita, comparar precios y calidades, ser cautelosos con las ofertas y promociones, vigilar el buen funcionamiento del frigorífico y mantenerlo en orden, revisar y mantener el orden la despensa, leer el contenido de las etiquetas, diferenciar entre fecha de caducidad y fecha de consumo preferente, servir pequeñas porciones a los comensales y congelar las sobras para consumir en otro momento o bien utilizarlas para la elaboración de nuevos menús.
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