El texto del anteproyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética ha sido presentado este lunes por la vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, al Consejo Asesor de Medio Ambiente (CAMA), dentro de los trámites previos a su remisión al Consejo de Ministros antes de iniciar su tramitación parlamentaria.

Este anteproyecto impedirá que las zonas urbanas declaradas bajas en emisiones puedan revertirse, dado que «cualquier medida municipal que suponga regresión deberá contar con un informe positivo de administraciones estatales o autonómicas competentes”.

El borrador fija que cualquier medida que suponga una regresión de las zonas de bajas emisiones ya existentes deberá contar con el informe previo de las administraciones estatales o autonómicas competentes en materia de protección ambiental. 

Como novedad, el texto indica que los municipios de más de 50.000 habitantes y los territorios insulares habrán de impulsar medidas de movilidad eléctrica compartida. Según la ministra, las zonas de bajas emisiones en las ciudades son “fundamentales” por razón de salud pública, ruido, y otras, y por ello, desde el Gobierno se ha optado por “endurecer” las disposiciones, a la vista de los comentarios de la consulta pública.

Otro de los grandes ejes de la nueva ley será “el mapa informativo de puntos de recarga de vehículos eléctricos”. Para favorecer la expansión de ese transporte el Gobierno desarrollará y pondrá a disposición del público una plataforma de información sobre puntos de recarga.

Con la incorporación de estas medidas se pretende que para el año 2030 se reduzcan las emisiones de gases de efecto invernadero al menos un 20 por ciento respecto a 1990; este objetivo es coherente con el aumento de ambición de la Comisión Europea, que pasaría del actual 40 por ciento a una horquilla entre el 50 y el 55 por ciento.

Según Ribera, con la ejecución de este plan, “se sentarían unas bases sólidas para progresar hacia la neutralidad climática del país, y lograr emisiones netas cero, no más allá de 2050”.