El polipropileno es uno de los materiales plásticos más usados en la actualidad. Se emplea en una amplia variedad de actividades y sectores como piezas de automóvil, equipos de laboratorio, dispositivos médicos e incluso en envases de comida y bebida. 

Fue sintetizado por J. Paul Hogan y Robert Banks por primera vez, siendo en 1957 cuando empezó a utilizarse de manera comercial. Su obtención se genera a partir de la polimerización del propileno y pertenece al grupo de termoplásticos. En la actualidad representa el segundo tipo de plástico más utilizado en todo el planeta gracias a su rigidez, dureza y alta resistencia química.

Las principales ventajas de su uso son:

-Ofrece gran resistencia al impacto, a la fatiga, al agua (por su baja absorción a la humedad) y al calor (por su elevado punto de fusión).

-Cuenta con un elevado grado de ligereza en comparación con otros plásticos debido a su baja densidad. 

-Aislante eléctrico.

En cuanto a su reciclaje, una vez los residuos de productos fabricados con propileno llegan a la planta de reciclado, se introducen en una cinta que recorrerá diferentes fases para su tratamiento: primero se realizará una selección y clasificación, tras lo cual se procederá a su triturado. Estas pequeñas piezas se someterán a continuación a un lavado donde el polipropileno, que es menos denso que el aguase separará por flotación de las impurezas, metales u otros plásticos diferentes.

Posteriormente pasará el proceso de extrusión y granceado. Es aquí donde el triturado se filtra y se obtiene la granza: el producto final del proceso de reciclado y futura materia prima reciclada, que sustituye al plástico virgen. Este es el último paso antes de su envasado y almacenamiento.

Gracias al trabajo de los recicladores, los viejos productos fabricados con polipropileno que fueron correctamente reciclados son convertidos en un nuevo recurso que dará forma a un nuevo producto, contribuyendo de este modo a la necesaria circularidad de nuestros residuos.